Desde el inicio de su gestión, incluso previo a su llegada a la Casa Rosada, el presidente Javier Milei tuvo fuertes críticas hacia el periodismo en general. En varias ocasiones, cuestionó de forma individual e insultó a una extensa lista de comunicadores y trabajadores de prensa luego de que hicieran comentarios que, para él, fueron opositores a su gestión y a su plan de gobierno.